fbpx

Según la Liga Independiente de Escuelas de Samba, organizadora del desfile anual, la nueva fecha dependerá de la existencia y disponibilidad de una vacuna y de si el Gobierno brasileño acepta declarar el feriado nacional en ese mes.

La ciudad brasileña de Río de Janeiro planea realizar su famoso carnaval en julio de 2021, informaron este martes las escuelas de samba, luego de que la pandemia del nuevo coronavirus obligara a posponer los tradicionales desfiles que ocurren anualmente en febrero.

La nueva fecha dependerá de la existencia de una vacuna, su disponibilidad y de si el Gobierno brasileño acepta declarar el feriado nacional en julio, dijo la Liga Independiente de Escuelas de Samba de Río de Janeiro (Liesa), organizadora del desfile anual de carnaval.

"Las escuelas de samba decidieron que si existe una vacuna y el feriado nacional es decretado, el desfile será en julio", dijo el vocero de Liesa, Vicente Dattoli, citado por la agencia de noticias AFP.

Las escuelas "se reunieron y, con mayor optimismo debido a las noticias sobre la eficiencia de las vacunas, sienten que ahora es posible fijar una fecha", que sería el 11 y 12 de julio, precisó. No obstante, aclaró que "sin una vacuna, no hay nada que hacer".

Pese al optimismo de Liesa, Mangueira, una de las más tradicionales escuelas de samba de Río, dijo que aún están expectantes.

"Mangueira no ha hecho nada aún. Ni siquiera tenemos una temática preparada", comentó el vocero de la escuela, Rubem Machado, quien explicó que se necesitan nueve meses para preparar un desfile. "Pero nos apresuramos, seis meses son suficientes", se corrigió.

El denominado "mayor espectáculo de la Tierra", como le dicen a los desfiles en el sambódromo de Río de Janeiro, se sumó en septiembre pasado a la lista de eventos multitudinarios cancelados en Brasil por la pandemia, como las fiestas populares de fin de año en la playa de Copacabana.

Con más de 166.000 víctimas fatales, Brasil es el segundo país con mayor número de muertos por la pandemia, después de Estados Unidos.

El carnaval de Río es el mayor del mundo y cada año atrae a millones de turistas a esta urbe costera.

El equipo de campaña del presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, y la vicepresidenta, Kamala Harris, publicó en las últimas horas de este domingo las cuatro líneas de acción del futuro gobierno en la plataforma oficial demócrata en la que consideró prioritarios la lucha contra el coronavirus, la recuperación de la economía, la equidad racial y el cambio climático.

El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, asistió este domingo a misa y reveló las cuatro prioridades iniciales de su gobierno, mientras el mandatario, Donald Trump, volvió a jugar golf, reiteró críticas a la prensa y recibió consejos de familiares cercanos para que aceptara la derrota electoral.

Así transcurrió el primer día luego de que ayer se reportara el triunfo del demócrata Biden en el estado Pensilvania, que le garantizó la mayoría absoluta de electores y dividió al Partido Republicano entre quienes reconocieron el resultado y los que apoyan a Trump en su cuestionamiento del escrutinio.

Biden inició la jornada en la iglesia católica San José Brandywine, en Greenville, en las afueras de Filadelfia -la ciudad más grande Pensilvania-, donde asistió a misa junto a sus familiares más cercanos y visitó el cementerio vecino, en el que están sepultados sus padres, su primera esposa y dos de sus hijos.

Periodistas que cubrieron esa actividad afirmaron que el presidente electo se arrodilló brevemente frente a una de las tumbas, según la agencia de noticias Europa Press.

Más tarde, la campaña de Biden actualizó su página web y publicó las que serán las cuatro prioridades iniciales del gobierno del presidente electo y su compañera de fórmula, Kamala Harris: combate al coronavirus, recuperación económica, igualdad racial y cambio climático.

Biden y Harris se proponen asegurar acceso a pruebas de coronavirus a toda la población, solucionar los problemas de protección al personal sanitario y divulgar información basada en evidencias, así como promover la creación de empleos “bien remunerados” y la ayuda económica para evitar despidos, entre otras medidas.

Además, prometieron eliminar “obstáculos a la participación” en la economía por motivos de raza y ampliar “el acceso a las oportunidades”, así como “reconstruir” la infraestructura para un crecimiento sostenible, eliminar las emisiones en el transporte público y lograr una producción de electricidad limpia de carbono.

Asimismo, Biden publicó en su cuenta en Twitter un video de un minuto y 28 segundos titulado “Desde el fondo de mi corazón: gracias”, en el que incluyó imágenes de los actos de la campaña y expresó: “Gracias por apoyarme, gracias por escuchar, gracias por creer, por acompañarnos, por nominarme”.

Mientras tanto, Trump regresó a su club privado de golf de Sterling -allí estaba ayer en el momento en que se hizo público el decisivo resultado en Pensilvania-, donde fue recibido en la ruta de acceso por simpatizantes republicanos y también por demócratas que portaban pancartas con leyendas tales como “Naranja aplastado” y “Trumpty Dumpty se cayó del muro”.

Con menos énfasis que hasta ayer, el mandatario volvió sin embargo a cuestionar el proceso de escrutinio y los resultados divulgados.

“El mejor encuestador de Gran Bretaña escribió esta mañana que esta fue claramente una elección robada, que es imposible imaginar que Biden superó a (el expresidente Barack) Obama en algunos de estos estados”, escribió Trump en Twitter.

“¿Desde cuándo los medios tendenciosos dicen quién será nuestro próximo presidente? Todo hemos aprendido mucho en las últimas dos semanas”, dijo en otro mensaje por la misma vía.

Junto a los mensajes del mandatario, Twitter incluyó la siguiente leyenda: “Esta afirmación sobre fraude electoral está en disputa”.

Paralelamente, la esposa y el yerno del jefe de la Casa Blanca, Melania Trump y Jared Kushner -además, asesor del mandatario- le recomendaron a Trump que reconozca el triunfo electoral de Biden, según la televisora CNN.

Melania “se ha unido a las voces del círculo íntimo del presidente Trump que le aconsejan que ha llegado al momento de aceptar la derrota”, afirmó CNN, que sustentó esa afirmación en “una fuente familiarizada con las conversaciones” en el entorno del presidente.

No obstante, en Twitter, Melania dijo que “el pueblo estadounidense merece elecciones justas” y “cada voto legal -no ilegal- debe ser contado”, y el vocero de la campaña de Trump, Jason Miller, sostuvo que Kushner “asesoró a Trump para que siga todas las vías legales para garantizar la precisión” de los resultados de las elecciones.

Paralelamente, George Walker Bush, el único expresidente republicano vivo, afirmó que “los estadounidenses pueden tener confianza en esta elección honesta, cuya integridad será confirmada y cuyo resultado es claro”, aunque admitió que Trump “tiene derecho” a pedir que se recuenten los votos.

“Aunque tenemos diferencias políticas, conozco a Joe Biden y sé que es un buen hombre que ha aprovechado la oportunidad que ha tenido para liderar y unificar a nuestro país”, dijo Bush en un comunicado.

Ayer reconocieron el triunfo de Biden los tres expresidentes demócratas vivos, Jimmy Carter, Bill Clinton y Obama.

Un total de 41 de los 50 estados del país están informando un incremento de casos de por lo menos un 10% comparado con la semana previa.

Estados Unidos registró ayer jueves 88.521 nuevos casos de coronavirus, el mayor número para un solo día desde el inicio de la pandemia y en pleno tercer gran pico de la enfermedad, según la base de datos de la Universidad Johns Hopkins (JHU).

El récord previo era de 83.731 casos y había sido reportado la semana pasada, el 23 de octubre.

En las últimas 24 horas hubo además 971 muertes por el virus, según JHU.

Estados Unidos, el país más afectado por el coronavirus, ya acumula más de 8,9 millones de contagios y 228.656 muertes.

Un total de 41 de los 50 estados del país están informando un incremento de casos de por lo menos un 10% comparado con la semana previa, siempre de acuerdo a JHU.

Ante la segunda ola de contagios, hasta el 1 de diciembre los franceses solo podrán salir para ir a trabajar si no tienen otro modo de hacerlo, ir a citas médicas, hacer las compras y tomar aire o ayudar a un pariente o allegado en dificultades.

El nuevo confinamiento que entrará en vigor desde la noche de este jueves en Francia incluirá teletrabajo masivo, uso obligatorio de mascarilla desde los seis años y desplazamientos limitados durante un mes, con el objetivo de luchar contra una segunda ola de coronavirus "más mortífera que la primera", detalló hoy el primer ministro.

El uso de mascarilla en las escuelas en Francia "se ampliará a los niños de la primaria a partir de los seis años", anunció el jefe de Gobierno, Jean Castex, ante el Parlamento, un día después de que el presidente Emmanuel Macron anunciara un nuevo confinamiento nacional, el segundo del año, para contener el avance del coronavirus.

"A partir del regreso a clases el lunes, el protocolo sanitario será adaptado y reforzado para garantizar la protección de todos los niños, los maestros, los padres de los alumnos", dijo Castex, precisando que la nueva medida seguía una propuesta del Alto Consejo de Salud Pública.

El premier francés dijo que su Gobierno "había anticipado" la segunda ola de coronavirus, pero que "ningún país previó que se acelerase de manera tan rápida y brutal".

"No he dejado de llamar a la vigilancia", insistió.

"Algunos que nos dicen hoy que deberíamos haber actuado de manera más firme o que no hacíamos lo suficiente, afirmaban en aquel momento que hacíamos demasiado", afirmó, citado por la agencia de noticias francesa AFP.

Francia, muy golpeada por la segunda ola del coronavirus, decretó este miércoles un nuevo confinamiento nacional de al menos un mes, aunque menos estricto que el de la primavera puesto que las escuelas, fábricas y servicios públicos seguirán abiertos.

Los comercios "no esenciales" estarán en cambio cerrados, así como los cines y las salas de espectáculos.

Habrá telebrabajo "los cinco días de la semana", dijo Castex.

"Debemos continuar trabajando tanto como sea posible, por supuesto en condiciones sanitarias protectoras y deteniendo la circulación viral", porque "el desempleo y la pobreza también pueden matar", explicó el primer ministro.

Los mercados permanecerán abiertos, así como los jardines de infantes. Las competencias deportivas estarán autorizadas.

En síntesis, hasta el 1 de diciembre los franceses solo podrán salir para ir a trabajar si no tienen otro modo de hacerlo, ir a citas médicas, hacer las compras y tomar aire o ayudar a un pariente o allegado en dificultades.

Desde agosto Francia observa un fuerte repunte de contagios.

En la página oficial del Gobierno, las autoridades dieron cuenta ayer de 244 muertos en los hospitales en las 24 horas previas, lo que elevó a 35.785 el total de fallecidos en Francia desde el inicio de la pandemia.

Según el ministro de Salud, Olivier Véran, se puede estimar en "un millón" el número de franceses actualmente portadores del nuevo coronavirus.

Con más de 3.000 enfermos en cuidados intensivos, es decir más de la mitad de las camas disponibles ocupadas, las autoridades temen ante todo la saturación de estas unidades.

Desde el empresariado, el nuevo confinamiento motivó críticas al Gobierno.

"Necesitamos esos comerciantes para la vida social", dijo el presidente de la patronal Medef, Geoffroy Roux de Bézieux, recordando que representan también "más de tres millones de empleos".

"Son empresas extremadamente fragilizadas que corren el riesgo de quebrar", estimó en declaraciones a Europe 1.

Es el segundo país más afectado después de EEUU, aunque mantiene una de las tasas de mortalidad más bajas del mundo y redujo los contagios en los últimos siete días, pero las autoridades se preparan para un aumento de los casos dado que se acerca Diwali, la fiesta religiosa más grande del país, el 14 de noviembre.

India, el segundo país más afectado por la pandemia después de Estados Unidos, superó hoy jueves los ocho millones de casos de coronavirus, y las autoridades se preparan para una nueva ola de contagios, informó este jueves el Gobierno.

El país de 1.300 millones de habitantes registró 8.040.203 contagios y 120.527 muertes atribuidas oficialmente al Covid-19, según el último recuento oficial presentado por el Ministerio de Salud.

India tiene una de las tasas de mortalidad más bajas del mundo y redujo los contagios en los últimos días, pero las autoridades se preparan para un aumento de los casos dado que se acerca Diwali, la fiesta religiosa más grande del país, el 14 de noviembre.

Nueva Delhi registró 5.000 nuevas infecciones en la última jornada, su cifra más alta desde el comienzo de la pandemia, y las autoridades temen que se superen pronto los 10.000 nuevos casos diarios en la capital, informó la agencia de noticias AFP.

La capital financiera, Bombay, que es la ciudad más afectada de India con más de 250.000 casos y más de 10.000 muertes, tiene actualmente unos 2.000 nuevos casos por día.

El primer ministro, Narendra Modi, lamentó recientemente las imprudencias de la población y, sobre todo, el incumplimiento de las normas de distanciamiento social.

Brasil y EEUU firmaron un acuerdo para desburocratizar el comercio y contra la corrupción, considerado un paso hacia una tratado de libre comercio apoyado por el Consejero de Seguridad Nacional, Robert O'Brien que criticó a la empresa china Huawei y hoy es recibido por el presidente Jair Bolsonaro.

 

Los gobiernos brasileño y estadounidense procuran "reforzar su cooperación económica, facilitar el comercio, las inversiones y las buenas prácticas regulatorias y promover medidas contra la corrupción", señala un comunicado de la Cancillería brasileña.

Dotado de tres anexos el entendimiento firmado da continuidad al acuerdo marco "Cooperación para la Prosperidad" anunciado en 2019, en Washington, por los presidentes Donald Trump y Bolsonaro.

"Se pretende que este paquete medidas sea la base de un amplio acuerdo comercial a ser negociado en el futuro entre las dos más grandes economías del continente americano", señala una nota de la Cancillería y el Ministerio de Economía brasileños.

El Consejero de Seguridad Nacional Robert O'Brien dijo que una futura área de libre comercio será "óptima para Brasil y óptima para Estados Unidos".

O'Brien comentó que si el gobierno permite que Huawei se instale, la compañía china podrá "descifrar datos que son generados en cualquier lugar de Brasil ya sea por el gobierno, en temas de la seguridad nacional o por las empresas privadas" en asuntos relacionados con la innovación y la propiedad intelectual, publicó el diario Estado de San Pablo.

O'Brien acusó a Huawei de perpetrar "ataques" cibernéticos y recomendó "fuertemente" que Brasil opte por una empresa "confiable" para el tendido de la red de 5G, durante un encuentro celebrado ayer con la Federación de Industrias de San Pablo.

Posteriormente O'Brien se reunió en Brasilia con el canciller, Ernesto Araújo, y el ministro de Economía, Paulo Guedes, y este martes será recibido por el presidente Bolsonaro en el Palacio del Planalto.

"El Consejero de Seguridad de Trump viene a Brasil a anunciar un paquete comercial y hace campaña contra China", dice el principal título de la edición on line del diario Folha de San Pablo.

En el mismo artículo Folha señala que la ministra de Agricultura, Tereza Cristina, y el vicepresidente, general Hamilton Mourao, temen que el eventual veto a Huawei afecte las relaciones con China y las exportaciones a ese país.