Unas 500 personas despidieron al hombre afroamericano que murió a manos de la policía de Minneapolis. Sus restos fueron trasladados a un cementerio de las afueras de la ciudad para ser enterrados junto a su madre.
Familiares, amigos y líderes comunitarios asistieron este martes en Houston (Texas) al funeral de George Floyd, el afroamericano muerto en Mineápolis a manos de la policía, entre rezos, elegías y canciones en los que se recordó su figura, se pidió justicia y un cambio en la sociedad para acabar con el racismo.
A estos servicios fúnebres privados en honor a Floyd, después del velatorio del este lunes en el mismo templo y el funeral que tuvo lugar el jueves pasado en Mineápolis, asistieron unas 500 personas por estricta invitación de la familia, una cuarta parte del aforo debido a la pandemia del coronavirus.