La Organización Mundial de la Salud (OMS) recibió hoy un claro apoyo de los países para seguir liderando la respuesta global a la pandemia, mientras que una primera evaluación independiente aprueba su actuación y señala que los países no pueden pretender transferirle sus propias responsabilidades.
"La respuesta de la Secretaría de la OMS al covid-19 fue más rápida que frente a las epidemias del SARS y del MERS (dos coronavirus anteriores que circularon entre humanos), pero esto no provocó una acción rápida por parte de todos los Estados miembros", concluye en su primer informe el Comité Independiente de Supervisión de la organización.
El documento, publicado coincidiendo con el primer día de la asamblea mundial de la OMS, la instancia de control recomienda que los países revisen el Reglamento Sanitario Internacional, que guía las acciones de la OMS en tiempos de crisis sanitarias, por el desfase que parece haber entre lo que son sus obligaciones y las expectativas de los países.
Estados Unidos ha liderado en las últimas semanas los ataques contra la OMS, a la que ha acusado de gestionar mal la pandemia y de haber supuestamente encubierto a China al inicio de esta crisis.
Esas acusaciones han tenido eco en las redes sociales y han alimentado todo tipo de teorías que ponen a la OMS en el centro de una trama conspirativa internacional.
"En el intento por soslayar el brote, hay un país que no hizo gala de transparencia y la OMS también fracasó en su misión de compartir la información con todos y de buena fe, esto no puede volver a ocurrir. La OMS debe cambiar", dijo el secretario de Salud de EEUU, Alex Azar, en su intervención en la asamblea
Al inaugurar esta cita, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, apoyó las solicitudes para que haya un evaluación de la forma de cómo han actuado él y su equipo durante la pandemia.
En este sentido, respaldó una resolución que la Unión Europea ha presentado a la asamblea mundial proponiendo una revisión completa e imparcial de las decisiones tomadas por la cúpula de la OMS.
Sin embargo, el informe del Comité Independiente de Supervisión sostiene que tal evaluación no sólo debe incluir a la OMS, sino también "las acciones de los Estados miembros en respuesta a la pandemia de covid-19".
Tras conocerse en los primeros días de enero sobre el brote del nuevo coronavirus en China y en las semanas que siguieron, los países reaccionaron de forma muy diversa a esa información: algunos aplicaron rápidamente las directivas de la OMS y otros hasta se adelantaron a ellas, pero una parte minimizó los riesgos y solo tomaron medidas cuando la gravedad de la situación ya era obvia.
"Yo mismo iniciaré una evaluación independiente en cuanto pueda para examinar las lecciones aprendidas y emitir recomendaciones que mejoren la capacidad de respuesta a las pandemias, en los niveles nacional y mundial", dijo Tedros.
El Comité Independiente de Supervisión advirtió que precipitar esa evaluación -como demandan los críticos de la OMS- y realizarla en plena respuesta (al covid-19) podría perjudicar su capacidad para una acción efectiva.
Los miembros de ese comité son personalidades destacadas en el mundo de la ciencia y proceden de diversas regiones. Su presidenta es la británica Felicity Harvey y entre sus miembros está el estadounidense Jeremy Konynkyk, exdirector de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo (USAID).
En medio de la polémica desatada por las acusaciones del presidente de EEUU, Donald Trump, y su decisión de retirar toda su financiación a la OMS, presidentes y ministros de Salud de decenas de países desfilaron hoy virtualmente en la asamblea mundial para confirmar su respaldo a la organización.
"La OMS son sus Estados miembros y depende de nosotros que pueda cumplir plenamente su rol en esta pandemia", dijo el presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien prometió un "aumento substancial del apoyo financiero" de su país a esta entidad.
La canciller alemana Angela Merckel recordó que "la OMS es la organización con legitimidad en el ámbito de la salud" y que sus miembros deben trabajar para garantizar su financiación de forma duradera.
Por su parte, el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, afirmó que "la OMS fue instrumental en la orientación y apoyo a los gobiernos africanos", cuyos países son altamente vulnerables al coronavirus.
EFE