La ciudad de Guayaquil se ha convertido en el epicentro del brote de coronavirus en Ecuador y en una de las localidades más afectadas de América Latina. En una entrevista reciente a AFP, la alcaldesa de la urbe, Cynthia Viteri, aseguró que "no había y no hay espacio ni para vivos ni para muertos".
Asimismo, la funcionaria señaló que se está "viviendo una guerra" para la que no estaban preparados, mientras la cifra de casos confirmados en la ciudad ascendió a 4.077, de un total de 7.603 contagios a nivel nacional y 369 decesos oficiales.
Las declaraciones surgen en medio del colapso del sistema hospitalario y funerario de la ciudad, que ha dejado a cientos de hogares conviviendo con las personas fallecidas dentro de las viviendas en espera de los protocolos para el levantamiento de cadáveres. El 12 de abril, las autoridades anunciaron que más de 700 cuerpos sin vida fueron retirados de numerosas casas de Guayaquil.
Las cifras de muertes "no son reales"
Los reportes oficiales de la Secretaría de Gestión de Riesgos señalan que hasta el momento solo 124 personas han muerto por covid-19 en Guayaquil. Sin embargo, Viteri menciona que estas cifras "no son reales", pues no hay las pruebas suficientes en el país para determinar si las personas padecían o no la enfermedad.
"Mueren los pacientes sin haberse realizado jamás una prueba, y no hay espacio, ni tiempo ni recursos para poder hacer exámenes posteriores y saber si murió o no de coronavirus", explicó la alcaldesa tras señalar que en marzo "hubo 1.500 muertos más" que en el mismo periodo durante 2019.
Ataúdes de cartón
Mientras, las autoridades municipales empezaron a repartir ataúdes de cartón para resolver la crisis de los cadáveres acumulados ante el desborde de morgues y hospitales, alegando que no disponen de madera ni aluminio.
Además, se anunció la habilitación de dos cementerios con capacidad aproximada de 12.000 tumbas para enterrar de forma gratuita a las víctimas de la pandemia en la ciudad.
Fuente: RT Español